Una boda rural autogestionada
14 julio, 2024

Pla de Manlleu esperaba a Ready to Rock para el enlace de Sergio y Nona el 29 de junio.
Llegar allí fue un tanto curioso con tanta curva y tanto interior, realmente creímos estar perdidos, pero finalmente llegamos a aquella pequeña urbanización en la que se iba a producir el enlace. Nos llamó mucho la atención que todo estaba organizado por lxs mismxs novixs en su casa, una forma muy bonita de casarse.
Las pruebas se hicieron de rogar por una pequeña problemática con el generador, pero al poco rato pudimos acabar de montar sobre el depósito de agua y probar para ser la guinda de aquel pastel de bodas.
Con todo probado decidimos acercarnos al pueblo a tomarnos algo para hacer tiempo. En seguida descubrieron que éramos una banda que esa noche iba a tocar, quizá nuestras camisetas de «Ready to Rock» eran una pista demasiado evidente.
Ahora sí, refrescados y con energía, fuimos al recinto a prepararnos para cenar y dar el concierto.
Aparcamos los coches bien lejos, en una especie de granero, con la pequeña libertad de ser los primeros en irnos, por eso pudimos tapiar el paso de otros coches que había por allí. Un camarero muy simpático nos empezó a servir los entremeses que iban a ser la cena que, coincidimos los cuatro, nos encantaron.
Ahora sí, entregados los ramos y los regalos, nos colocamos en nuestros puestos y comenzamos con el baile nupcial; Song 2 de Blur. Un pequeño indicio de lo que se venía, al público le gustaba la marcha.
Como pintaba, fue un bolazo. El público encantado desde el minuto uno, se atrevía a hacer stage diving hacia otrxs invitadxs durante gran parte del concierto. Todo se cantaba, todo se bailaba y casi no nos dejan irnos.
Aunque a las que no dejamos irse fue a las camareras.
Mirad, en Ready to Rock hay una maldición: si eres guitarra solista, tendrás problemas relacionados con el coche. Hace años, durante un concierto, nos pidieron avisar por el micro de que un Megane gris se había llevado un choque de otro coche, resultando ser el de nuestro compañero Fran, que tuvo que dejar el bolo a medias para rellenar los papeles.
Pues en la boda de Nona y Sergi pasó algo parecido. Nos pidieron que avisáramos por el micro de que un coche estaba bloqueando la salida del resto… resultó ser de Albert, que en su último concierto como sustituto en Ready le tocó la maldición. Tuvo que salir corriendo a retirar el coche mientras salvamos un medley como power trío. Historias para no dormir.
Después del concierto pasamos un rato con lxs invitadxs que nos ofrecían ginebra de valencia y muchos halagos por el concierto. Aunque el mejor regalo el que nos hicieron lxs novixs, una botella de cava que hace el padre del novio dedicada a este día tan especial. Amamos estos detallazos.
Sergi y Nona, ¡mil gracias por contar con nosotros para vuestro enlace y que seáis muy felices!