Bien frescos por Taüll

19 de julio, 30 grados en Tarragona y Ready to Rock se dirige a Taüll para disfrutar de sus 20 graditos y participar en la Festa del Roser.

En esta ocasión volvimos a hacer uso de la 478neta para pegarnos 3 horas de viaje por climas desérticos, zonas montañosas y estanques. Pepe descubrió qué era un viaje con Ready en furgoneta escuchando Crims, ahora él también es un adicto. «Però d’això en parlarem més endavant…» Llegamos al Pont de Suert, donde haríamos noche en el Hostal Canigó (muy bonito, la verdad) y seguimos hacia Taüll.

Una vez allí atravesamos la plaza y nos estuvimos tomando algo mientras Vizuri hacía sus pruebas de sonido. Nos invitaron a coca con chocolate y coincidimos con una pareja a la cual realizamos la boda el año pasado, que nos estuvo explicando en qué consistían las fiestas. ¡Gracias por tenernos en consideración desde entonces! Estuvimos comprando recuerdos para la familia mientras hacíamos tiempo para probar y conociendo las calles.

En cuanto a las pruebas era el finde en diagonal, por lo que Pepe tuvo que probar de nuevo en un lado e ir caminando al centro para escucharlo todo. La señal del inear se perdía un poco por el escenario pero tras unos minutos de pruebas lo tuvimos todo bajo control. Hemos de decir que nos impacta cuando la gente nos aplaude mientras hacemos las pruebas de sonido, ¡cuando vean el bolo flipan!

Fuimos a cenar unas pizzas que acompañamos con unas patatas bravas riquísimas en La Fonda. El fresquito iba llegando a Taüll y nosotros fuimos a prepararnos para subir al escenario en cualquier momento. Todo indicaba que empezaríamos más tarde pero, por lo que nos dijeron, la plaza estaba más llena de lo habitual a esas horas e íbamos a empezar.

Estuvimos encantados con las gentes de Taüll ya que lo estuvieron dando todo desde el primer momento. Con la plaza llena y todxs cantando nos sentíamos como en casa. El escenario era bastante amplio y nos daba bastante juego para ir subiendo y bajando por las tarimas.

Después del concierto nos dimos prisa en desmontar para que Vizuri pudiese montar y dar su show. Fuimos con tanta prisa que se nos olvidó la funda de la pancarta debajo de la tarima en el escenario. Nos dimos cuenta cuando ya estaban tocando y Pepe, haciendo uso de su carisma, la consiguió no sabemos cómo.

Disfrutamos un rato del concierto contestando a los mensajes que nos dejáis por redes. Hubo una cosa bastante curiosa de una asociación de calvos contra los calvos que estaba desconenta con la inclusión de un calvo en nuestras filas. Pasas que cosan. Después de eso volvimos al Pont de Suert a descansar para al día siguiente seguir escuchando Crims y llegar a Tarragona de una pieza.

Una experiencia brutal, Taüll, ¡contad con nosotros para la próxima!