El pasado sábado día 29 fuimos cabeza de cartel en la boda de Chechu y Eve.
Y decimos que fuimos cabeza de cartel porque aquello era un festival, el “Boda Fest” concretamente, ubicado en un paraje desértico de Ulldecona, un lugar propicio en medio de una ola de calor que nos achicharraba durante las pruebas de sonido.
Como no podía ser de otra forma en un festival (pulserita de entrada incluida), el equipo era enorme y prometía ser arrollador si la insolación no terminaba con nosotros antes.
Para bajar esos grados de nuestros cuerpos decidimos darnos un baño en las piscinas de Ulldecona aprovechando las horas muertas antes de la actuación, situación que ha catapultado esta actuación al Top 5 de conciertos de Ready. La piscina manda.
Aunque no toda la banda tuvo el placer de disfrutar de ese baño. Blas, todo contracturado, cumplió el papel de abuelita que se queda con las neveras y cacharros mientras los nietos se bañan (acompañado de un buen vicio a la Switch) por prescripción médica y Dani, que esta vez tuvo que ausentarse por compromisos previos a la contratación.
Boby, nuestro compañero a las baquetas aquella noche, lo dio todo con nosotros y se lo pasó bomba, conoció a ciertos personajes del pueblo e incluso compartieron anécdotas de la mili y otras historias para no dormir.
Una vez allí, los novios irrumpieron en escena subidos en una moto al ritmo de Rammstein, cosa que acabó de confirmar que esa noche iba a ser bastante loca y diferente.
Las mesas de los invitados pasaban desde los Rolling Stone a System of a Down, pasando por AC/DC, Metallica o Red Hot Chili Peppers, y entre todas ellas estaba la mesa de Ready To Rock.
Disfrutamos de la comida (¡con estrella Michelin incluida!), de los vinos y con cierto retraso que ya suele ser costumbre en las bodas comienza el espectáculo.
Y es que pese a algunos contratiempos, diversos apagones por la humedad (las guitarras lloraban como la de George Harrison), micros que no suenan etc. la gente se lo pasó genial y no nos dejaba marchar sin tocar la última canción, por más que los plomos no estuvieran de nuestra parte. Llegamos a decidir “tocar” Highway to Hell acapella, como si de la intro de “Aquí no hay quien viva” se tratase, pero poco después los plomos volvieron para quedarse y Ready to Rock pudo terminar lo que había comenzado.
Desde luego una noche que no olvidaremos.
Gracias a Boby por compartir la noche con nosotros, a los asistentes de la boda que lo dieron todo con nosotros y, por supuesto, a Eve y Chechu por contar con nosotros en el día más importante de su vida.
¡Enhorabuena pareja!